lunes, 4 de enero de 2010

A Joan Manuel Serrat

La envidia de mi arte
El rojo de mi amanecer
La voz de mi conciencia
El respirar de mi ser

El alimento de mis sesos
La verdad de mi sentir
El soplar de mi viento
Las ganas de mi vivir

El agua de mi llanto
La claridad de mi palabra
El grito de mi libertad
El cincel que me labra

El parpado de mi ojo
La luz de mi razón
El tamaño de mi gozo
La fuerza de mi corazón

Pequeños extraterrestres

En mil y una películas de ciencia ficción se bromea con la posibilidad de sufrir una invasión extraterrestre. Se frivoliza con la idea de que seres de otro mundo vengan a la tierra y controlando nuestras mentes nos sometan a su voluntad.

Señores, señoras…. ¡¡¡ Ya están aquí !!!! Les aseguro que ya estamos invadidos.

Están por todas partes y son muy pequeños, miden poco más de medio metro, y no nos llama la atención… ¡¡¡¡ pueden controlar nuestras mentes !!!! Es más, emiten un sonido que hace que hagamos todo lo que ellos quieran, no les hace falta hablar para convencernos de lo que quieren, con un simple e idéntico sonido actuamos bajo su voluntad.

Sus diferencias con nosotros no acaban aquí, no, hay mucho más. Por ejemplo: No comen comida como los humanos, no, solo toman leche… por la mañana, por la tarde, por la noche, de madrugada… a todas horas toman leche, solo leche, hasta doce veces al día…. ni siquiera le ponen un poco de café o mojan una galleta… y no les vale cualquier leche, no… con su mágico sonido consiguen provocar que algunos de nosotros la segreguemos… ¡¡¡ y a nadie le extraña !!!

Cualquiera de nosotros sabe de sobra que para tragar líquidos y no ahogarse hemos de estar mas o menos verticales… bueno, pues ellos tragan toda esta cantidad de leche siempre tumbados boca arriba… incluso se quedan dormidos mientras la toman en esta postura. Inténtalo hacer… veras como para los humanos es imposible.

De vez en cuando, cuando les sobra, o simplemente cuando les da la gana igual de fácil que tragan la leche les sale para fuera de sus cuerpos disparada.

Según mis investigaciones estos seres provienen de un planeta rocoso muy pequeño que orbita una estrella parecida al sol. Los días en su planeta duran solo tres horas, ya que cuando llegan aquí tienen costumbre de comer, jugar y dormir en periodos de esa longitud, La gravedad de su planeta es mucho menor que la de la tierra… ¡¡ aquí no son capaces ni de sostener sus cabezas!!!

En su planeta tampoco les hace falta andar, debe tener una superficie muy erosionada y lisa, y van a todos lados arrastrándose. Aquí lo tienen más complicada, con tanto obstáculo, pero una vez más hacen uso de su poderoso sonido para que nosotros les llevemos a todos lados ¡¡ como lo más normal del mundo!!

El suyo debe ser un planeta con mucha actividad sísmica, prueba de ello es que prefieren dormir siendo agitados, meneados y con ruido que dormir tranquilos y en silencio.

Nuestras peores imaginaciones se han hecho realidad, ellos están aquí, son pequeños, algunos no tienen pelo, no hablan, no andan, no paran de tomar nada más que leche, duermen de día, juegan de noche, comen boca arriba, se duermen con ruido, no sostienen su cabeza, ¡¡ no saben que tienen orejas !! y tienen el poder, con su extraño sonido, de hacer que todo esto no nos sorprenda y que hagamos todo lo que nos mandan

¿Es que si no son verdes no pueden ser extraterrestres?

He visto cosas que no creeríais....

He visto al mundo cambiar, sus formas se volvían por momentos alargadas. Se estiraba hasta transformase en un cilindro hueco de coloridas y largas líneas rectas, dentro del cual solo yo permanecía inalterado, como visitante de un extraño planeta al que llegas por error, pero sin la sensación de extrañar nada.

He visto a la tierra calentarse, calentarse hasta tornarse en fuego, calentarse hasta recordar al mismo infierno, en el que todo se vuelve cegadora oscuridad y solo el horizonte queda como punto de referencia. El peligro te abraza con su espinoso cuerpo y te llena la boca de su agridulce sabor, recordándote que tus papilas gustativas tienen razón.

He visto aparecer una sombra, y volverse esta realidad como la tormenta se vuelve relámpago. La realidad no deja lugar a dudas… es la muerte en forma de monstruo todopoderoso. Puedes oler su aliento tosco y adivinar sus definitivas artes. Es mas, puedes hablar con ella, pero no te escucha… lo único que hace es mirarte a los ojos fijamente y decirte al oído "comete un error, por pequeño que sea, y vendrás conmigo". He visto como afilaba coches hasta convertirlos en guadañas y, una vez armada, disponerse a usarlos contra mí, una y otra vez, incansable, sintiendo en mi cuello el frío de su metálica hoja....

He visto como el acero y la carne pueden unirse y formar un solo ser capaz de ir al infierno a visitar a la muerte y volver al mundo con una única idea... bajar de nuevo....